viernes, 20 de mayo de 2011

Una de ellas, llora de luto y la otra, canta victoria.

No se puede definir como ciclotimia, no se puede definir como bipolaridad; porque si no sería como tener 2 personalidades que en un momento una manda y la otra desaparece, y al segundo pasa lo inverso. No, no me puedo definir con esas palabras fuertes. Pero no podría decir si lo que me pasa a mí es mejor o peor. Por supuesto que no es una enfermedad, pero es lo contrario a éstas.
En mi cabeza, en mi interior, tengo una lucha permanente entre 2 personalidades muy marcadamente opuestas. No es que si está la una no está la otra, es lo contrario: tengo que convivir con éstas 2 peleándose en mi cabeza constantemente.
A veces ya no sé si son sólo personalidades, o como dicen algunos: "el Diablito y el Angelito en cada hombro". Es exactamente esa sensación que algunas películas cuentan. Pero esto se siente más como un monólogo interno, no como algo externo que intenta convencerme de que haga algo o lo otro, si no que la que habla soy yo; discutiendo con mi otro yo.
Una de estas "personitas" al que le dicen mucho "el Angelito en mi hombro" (pero como explique está dentro de mi cabeza, no es ninguna alucinación, no veo ángeles, ni diablos, y no estoy loca. Aclaro.) se caracteriza por ser la boba, la inocente, la que se cree todo el cuento de hadas que le plantearon como real a los 5 años. Cree profundamente en el amor, y piensa que es lo más importante que hay en la vida. Se creyó todo el cuento de casarse, tener 5 hijos, una casa divina con un perro, y ya sabe con quien quiere hacerlo, porque está profundamente enamorada de un hombre, al cual, toma como su Príncipe Azul. Esta "personita" es extremadamente sensible, llora por la vida de tristeza como de felicidad, le gusta estar prolijita y es ordenadísima. Le gusta estudiar, sentirse bien consigo misma por sus logros, y nunca haría trampa. Pero sobretodo cree que todo su mundo es de color pétalos de rosa. En resumen, una completa estúpida.
La otra "personita", la llamada "el Diablito" está completamente asqueada con todo lo que se trata del "Angelito". Se ríe de todo lo que sea un poco cursi. Es histérica, desordenada y vaga. Le encanta llamar la atención con sus actos de inmadura (según la otra personita), hace todo lo contrario a lo que debería hacer. Quiere probarlo todo. Le encanta besar. Odia que la gente le ponga límites, le gusta llevar ella el control de la situación sino se desespera. Odia la idea tonta de casarse y de tener hijos, cree que los hijos la culparían a ella de sus problemas (como se hace a todas las madres) y no soporta esa idea.
Es violenta, egoísta, ambiciosa y mataría para lograr lo que ella quiere. También ama, ama muchísimo y desesperadamente. Y mataría por la gente que ama, cada día de su vida. Pero no cree en el amor como la otra personalidad, cree que uno debe divertirse con la persona que ama, y si las cosas se ponen tensas o aburridas es preferible alejarse.

Como dije, estas personitas estás dementes. Sobre todo el "Diablito", la otra es tan sólo una condenada estúpida. ¿Pero qué sería de mí sin una de ellas? El problema es el estrés que me provoca que para cada paso las tenga a ambas armando una guerra en mi cabeza sin fin, llena de sí y no. Lo peor de todo es que ambas personalidades son muy honestas y expresivas, no dejan de hacerse notar. Ambas son muy pasionales así que nunca puedo pensar o saber que es realmente lo mejor para mí, racionalmente. Pero lo peor de todo es el miedo que tengo de que una de ambas desaparezca o se calle para siempre pero tampoco puedo llegar a ningún equilibrio con tantas discusiones en mi interior.

Ahora una de ellas, llora de luto y la otra está cantando victoria. Luto por el amor que mató el "Diablito" y del cual se regocija delante del "Angelito".

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