martes, 20 de septiembre de 2011

Es hora de perdonar. Mis heridas ya dejaron de doler, pero aún así dejaron cicatrices en mi piel que no puedo borrar.
Estoy serena, estoy calmada. Ya sé que es lo que quiero con respecto al rencor que tenía por dentro. Lo quiero escupir. No lo quiero conmigo.
Es hora de cambiar. Es hora de olvidar y saber perdonar. Nada va a volver a ser como antes, una vez que algo se rompió es muy difícil volverlo a construir, pero deberíamos intentar. Intentar lograr tener paz entre nosotros. Por nuestro bien, por el bien de los demás.

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