martes, 24 de julio de 2012
Mi abuela, sentada en su sillón, con un ojo morado me dijo "siempre hay una buena y una mala noticia"... Esta vez, la mala le tocó a ella. Me quedé helada cuando lo dijo intentando felicitarme por mi "buena noticia", pero yo no podía para de pensar en ella. Es increíble como esta sociedad se fue al carajo. Es insoportable esta manera de vivir de la que hemos intentado sobrevivir. Cómo puede ser que haya gente tan sucia? No podemos seguir soportando vivir así!
Violencia
Por qué estamos sumergidos en tanta violencia humana? Por qué soportamos el sobrepaso excesivo de los límites? Por qué debemos ser fuertes pero en silencio? Por qué nunca se hace nada al respecto?
Un poco de justicia exijo. Un poco de seguridad. Un poco de paz y un poco más de amor.
Callados, en silencio, con las manos cruzadas, intentando ser más fuerte que el enemigo, pero nunca lo logramos. Ese enemigo goza de poder, un rival que vemos día a día.
Un poco de justicia exijo. Un poco de seguridad. Un poco de paz y un poco más de amor.
Callados, en silencio, con las manos cruzadas, intentando ser más fuerte que el enemigo, pero nunca lo logramos. Ese enemigo goza de poder, un rival que vemos día a día.
Momentos en los que uno se entera de una mala noticia y la piel se eriza. El terror que debes ocultar para no hacer sufrir al resto. Todos los demás problemas pasan a ser circunstanciales, pasan a segundo plano. Y comienzan a reírse de uno, y a la vez te avisan que no son importantes como lo son otros.
Vas por la vida lloriqueando por idioteces, hasta que te abofetean la cara con la cruda realidad. Enfermedades, violencia, inseguridad, más violencia, más muerte. Miedo.
Vas por la vida lloriqueando por idioteces, hasta que te abofetean la cara con la cruda realidad. Enfermedades, violencia, inseguridad, más violencia, más muerte. Miedo.
lunes, 23 de julio de 2012
Futura diseñadora
Ella jugaba y jugaba, siempre por su cuenta en esa habitación extensa. Saltaba sobre la cama, sola, con su vestido rojo de volados. Un vestido que una vez, había sido de su madre, pero esta vez llevaba el papel de un disfraz más de ese cajón. La niña de tan sólo unos 10 años, jugaba a que creaba sus propios vestidos. Soñaba con ese momento de su vida en el que era grande, pero no como todas las demás niñas queriendo ser una madre. Esa niña de ojos grandes era distinta, ya que no se divertía jugando a ser ama de casa, ella jugaba a ser una mujer importante, en una fiesta importante, con un vestido importante..Soñaba con crear sus propios vestidos.. Soñaba con lo que hoy en día sigue soñando con hacer.
Siendo parte de tu juego
La luz se había ido, como por acto del destino, quien decidió cortar la electricidad justo en aquel preciso momento donde todos estábamos sumergidos de alcohol. Un momento en el que las malas acciones recorrían el ambiente. Tu mano sobre mi cintura y mis labios rozando tu oreja lo decían todo. Sin palabras, y a oscuras. Ya nos teníamos tan cerca que nada podía separarnos sin antes tocarnos por primera vez. Nada podía romper ese lazo tan sólo sexual, pero a su vez, amistoso. Y entre un par de palabras provocativas, nuestros labios comenzaron a tocarse, a jugar, a llevar a cabo aquello tan prohibido, tan esperado. Besos, palabras, tus manos sobre mi cuerpo, y mis labios sobre tu cuello a plena oscuridad de la noche.
Eramos los protagonistas de un juego que meses atrás había comenzado. Después de muchas palabras, esta vez se convertían en acciones imprudentes e impulsivas.
Aún no se conoce al ganador, no se puede nombrar al finalista. De todas maneras, ya obtuve lo que quise.
Eramos los protagonistas de un juego que meses atrás había comenzado. Después de muchas palabras, esta vez se convertían en acciones imprudentes e impulsivas.
Aún no se conoce al ganador, no se puede nombrar al finalista. De todas maneras, ya obtuve lo que quise.
martes, 10 de julio de 2012
miércoles, 4 de julio de 2012
Un cliché más en tanta basura humana
"La vida es injusta", dicen pero es tan sólo un cliché que repetimos para no hacernos cargo de nuestras acciones. Nosotros somos los injustos. No queremos admitir entonces culpamos a la vida, culpamos al destino, al karma, a los medios, a la política, a la economía, a los sistemas. Pero en fin, somos nosotros los que manejamos todo eso. Los hombres de esta sociedad, regida por nuestros sistemas, nuestras ideas, nuestras acciones.
Si a uno no le gusta las cosas injustas, entonces debería ser uno el justo. Pero ahí entran cuestiones más "importantes" como nuestras comodidades, nuestras preferencias, nuestras cosas. Y ahí comenzamos a ser egoístas, y terminamos siendo hipócritas e injustos.
Si a uno no le gusta las cosas injustas, entonces debería ser uno el justo. Pero ahí entran cuestiones más "importantes" como nuestras comodidades, nuestras preferencias, nuestras cosas. Y ahí comenzamos a ser egoístas, y terminamos siendo hipócritas e injustos.
Todo en mi cuerpo quiere verte
No puedo sacarte de mi mente. Desde el momento en que te vi frente a frente, ese fuego tuyo quemó mi mente y se altero mi equilibrio para siempre. No me interesa nada mas, soy un ente. Constantemente sueño con verte y es que conocerte no me fue indiferente. Sería una bendición cerca tenerte. Ojala te encuentre, quizá casualmente. Todo en mi cuerpo quiere verte, y pide a gritos abrazarte o por lo menos escuchar tu voz, ya que no puedo sacarte de mi mente. Mi corazón salta en verte. No puedo sacarte de mi mente, que bien se siente. No puedo sacarte de mi mente, es mas que fuerte. Es una suerte conocerte. Criatura del sol, tu pensamiento ilumina el presente...
No puedo sacarte de mi mente...
No puedo sacarte de mi mente...
*fragmentos de No puedo sacarte de mi mente- Los Cafres
martes, 3 de julio de 2012
Corremos, apurados, en esta ciudad gris de calles oscuras. Caminamos juntos, pero separados; cada uno con su propio destino. Somos todos distintos, pero a su vez, somos lo mismo. Personas de esta masa, unidas por el ritmo de nuestros pasos. Un ritmo manejado por el tiempo. Escuchamos el tic-tac que nos apura y que no se puede detener.
Es una carrera sin meta. Saltamos los obstáculos por miedo de nos atrapen, no por miedo de no llegar.
Es una carrera sin meta. Saltamos los obstáculos por miedo de nos atrapen, no por miedo de no llegar.
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