Momentos en los que uno se entera de una mala noticia y la piel se eriza. El terror que debes ocultar para no hacer sufrir al resto. Todos los demás problemas pasan a ser circunstanciales, pasan a segundo plano. Y comienzan a reírse de uno, y a la vez te avisan que no son importantes como lo son otros.
Vas por la vida lloriqueando por idioteces, hasta que te abofetean la cara con la cruda realidad. Enfermedades, violencia, inseguridad, más violencia, más muerte. Miedo.