"La vida es injusta", dicen pero es tan sólo un cliché que repetimos para no hacernos cargo de nuestras acciones. Nosotros somos los injustos. No queremos admitir entonces culpamos a la vida, culpamos al destino, al karma, a los medios, a la política, a la economía, a los sistemas. Pero en fin, somos nosotros los que manejamos todo eso. Los hombres de esta sociedad, regida por nuestros sistemas, nuestras ideas, nuestras acciones.
Si a uno no le gusta las cosas injustas, entonces debería ser uno el justo. Pero ahí entran cuestiones más "importantes" como nuestras comodidades, nuestras preferencias, nuestras cosas. Y ahí comenzamos a ser egoístas, y terminamos siendo hipócritas e injustos.